En la Región más de 20 mil adultos mayores siguen activos en el mundo laboral
El Observatorio Laboral del Sence, ejecutado por la UACh, publicó el Boletín del Adulto Mayor, que entrega cifras regionales acerca de la ocupación de los adultos mayores
En la región, 20 mil 229 personas mayores se encuentran activas en el mercado laboral. Número que corresponde aproximadamente, al 27,5 por ciento de la población total de adultos mayores que reside en Los Ríos. Del número de personas ocupadas, el 70 por ciento corresponde a hombres y el 30 por ciento, a mujeres.
Estas cifras forman parte del Boletín del Adulto Mayor que realiza el Observatorio Laboral de Los Ríos, y que fue dado a conocer en el Mes del Adulto Mayor, que se celebra cada año en octubre.
Estos datos fueron analizados por la directora del Observatorio Laboral, Ester Fecci, quien señaló que un 43 por ciento de las personas ocupadas de la región trabaja de forma independiente, y el 50,9 por ciento lo hace de manera asalariada. Además, dijo que un dato relevante es que “el 52,6 por ciento de los adultos mayores ocupados lo hace de manera formal, frente a un 47,4 por cierto que está en la informalidad”.
Con relación a los principales sectores económicos en que se desempeñan, explicó que están los servicios sociales y personales (27,1 por ciento), silvoagropecuario y pesca (19,5 por ciento) y el comercio (13,5 por ciento).
Población Mayor
En Chile, se considera en este grupo etario a las personas mayores de 60 años. En la región de Los Ríos, el 20 por ciento pertenece a este grupo y de éste, el 55 por ciento son mujeres. “La cifra regional sobrepasa a la nacional, en el país el 18 por ciento de la población son adultos mayores”, precisó Ester Fecci.
“Somos la tercera región con el mayor índice de envejecimiento. En Los Ríos es 75,7. Recordemos que este índice representa la relación del número de personas mayores por cada cien niños. Primero está Ñuble, con 84,4, y en segundo lugar, la región de Valparaíso, con 82,8”, detalló.
“Esto es interesante, porque la tendencia indica que, en diez años, habrá más adultos mayores que niños en el país. La menor cantidad de niños se explica por razones sociales, económicas y culturales, mientras que la mayor cantidad de adultos mayores responde a razones biomédicas, que permiten alargar la vida promedio de las personas”, aseguró.
En ese sentido, dijo que para las personas que hoy día tienen 60 años, si se mantiene la tendencia, el promedio de vida se extendería hasta los 78 años. “Estos datos hay que tenerlos en cuenta a propósito del tema previsional para el cálculo de la pensión; son 78 años de acuerdo con los datos estadísticos y no 102 años o más que son los que toma el sistema previsional”, señaló.
¿Por qué aún después de la edad de jubilación las personas mayores siguen insertas en el mundo laboral? Al respecto, Ester Fecci planteó que las bajas pensiones es clave en la continuidad laboral. “Ese es un factor, pero también hay un sentimiento de que, después de los 60 años, las personas aún son vitales y quieren dedicarse al mundo laboral, porque, además, necesitan independencia y aportar a su grupo familiar”, sostuvo.
Frente a ese escenario, dijo que muchas personas mayores optan por el trabajo informal, el que -señaló- “hay que mirarlo en un formato de desarrollo de emprendimiento, de creatividad y de innovación, que se genera por alguna urgencia económica, pero también porque las personas quieren sentirse más libres”.
Estado Vital
En su análisis, Ester Fecci señaló que se tiende a identificar la vejez como un estado de declinación progresiva de las funciones orgánicas; sin embargo -dijo- se debería observar como un estado vital y evolutivo.
Afirmó que “el envejecimiento es un proceso continuo, progresivo, irreversible y heterogéneo, por lo tanto, surge la necesidad de que en nuestra región se genere una política pública asociada con las personas mayores, que se oriente a la demanda de este grupo etario y procure la mejora de las condiciones de vida, garantías de los derechos y el empoderamiento mediante la educación”.
Con respecto a esto último, planteó que el sistema educacional tiene que abrir sus puertas a una enseñanza sistemática, a una educación no formal, pero que sí active el conocimiento en este grupo etario.
Acciones de apoyo
Desde el Gobierno, a través de los servicios públicos asociados a materias laborales y de promoción de un envejecimiento positivo, se ejecutan acciones orientadas a integrar a las personas mayores a la sociedad.
Al respecto, el director regional del Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (Sence), Rafael Foradori, señaló que “entre nuestra oferta programática disponible de cursos, siempre está presente la inclusión en todos los ámbitos, y esto incluye a los adultos mayores. Todos nuestros cursos son sin límite de edad, y tenemos una importante variedad a las que pueden optar, sólo deben contar con un computador, tablet o teléfono celular para conectarse. Actualmente, el programa de cursos en línea ofrece ‘Adulto Digital’, que busca entregar herramientas que ayuden a mejorar la educación digital de los adultos mayores, con capacitación en las áreas de la tecnología de la información, emprendimiento, idiomas, habilidades socioemocionales, entre otras”.
En ese sentido, Foradori afirmó que “queremos que los adultos mayores se integren a la sociedad, que se conecten y pierdan el miedo a las nuevas tecnologías, lo que sin duda puede ser un enorme aporte para mejorar su calidad de vida, sentirse más activos y presentes en el actual mundo digital, cerrando una brecha que les permitirá abrirse nuevos caminos de conexión con sus propios pares, sus familias, los servicios e incluso el mercado laboral, si así lo desean”.
En tanto, desde el Servicio Nacional del Adulto Mayor, el coordinador regional, Cristian Delgado, dijo que “nuestro compromiso con las personas mayores es contribuir a su bienestar y fortalecer el buen trato y la visión positiva como parte fundamental de nuestra sociedad”.
En esa línea, explicó que a través del Programa de Envejecimiento Activo se busca contribuir a una vejez saludable y activa, especialmente, de quienes se encuentran en situación de mayor vulnerabilidad. Detalló que “la iniciativa proporciona conocimientos y oportunidades para el desarrollo personal y entre sus componentes hay talleres que fortalecen sus habilidades como una herramienta para emprender”.
“Así también, hay un proyecto de ley en el Congreso de envejecimiento activo y fortalecimiento de Senama, donde se reforma el Código del Trabajo, incorporando el contrato especial del trabajador adulto mayor, esto con el fin de regular y brindar la seguridad y protección que nuestros adultos mayores necesitan”, puntualizó Delgado.